Movimiento Patriótico y Nacionalista demanda acciones ante violacion territorial Río Masacre

 

El nacionalismo patriótico, en todas sus denominaciones, grupos, movimientos y personas, tiene que erigir su voz colectiva, ante la oprobiosa, afrentosa e ilegal conducta de chantaje y agresión de los haitianos y su entelequia gubernamental contra el territorio, el pueblo y la institucionalidad de la República Dominicana.

Los haitianos han decidido continuar con esta grosera violacion territorial fronteriza en abierto y deliberado desprecio al orden internacional, a las leyes vigentes y los protocolos vinculantes entre ambos países.

No hay justificación no excusa alguna para continuar con esta agresión en pleno desarrollo qué ejerce Haití contra nuestro país, de manera aviesa y cobarde.

El gobierno dominicano, sabía y sabe perfectamente de los planes desarrollados por los haitianos, y los ha venido permitiendo de manera sumisa, timorata y complaciente. Y es inaceptable!

Demandamos una respuesta apropiada del gobierno y de la Diplomacia dominicana, y de las consiguientes acciones internas y territoriales para proteger la integridad de nuestro país.

Demandamos del presidente de la República colocarse a la altura qué demandan los acontecimientos, delante de la Constitución y ejercer la defensa nacional.

Ninguna razón puede justificar la falta de accion eficiente y concreta del gobierno dominicano, que no puede escudarse, bajo la excusa de evitar injerencias internacionales en la Isla.

Nuestro país no puede postergar la defensa irrenunciable de sus derechos, por prioridades y ambiciones políticas coyunturales.

En la defensa irreductible de la patria, el gobierno contará con el respaldo popular. Con medidas complacientes y ambiguas, tendrá nuestro repudio.

Es hora de actuar con la debida reciprocidad ante la injusta e ilícita agresión haitiana, en continuacion de una política qué persiste desde hace décadas.

Llamamos a los sectores vivos de la población dominicana, a estar atentos al desarrollo de los presentes acontecimientos, y reiteramos nuestra vocación pacifista, pero nuestro irrenunciable derecho a defender y a proteger nuestra patria. Ningun interés patrimonial ni corporativo esta por encima del interés nacional.